viernes, 10 de noviembre de 2017

MEDIDAS DE SEGURIDAD EN LUGARES PÚBLICOS:






Es importante considerar algunas recomendaciones para poner en practica en lugares públicos tales como: realizar compras, tomar alimentos, divertirnos o, simplemente, pasar momentos de ocio, si bien encontramos una serie de medidas propias para nuestra seguridad, es preciso adoptar y aportar las nuestras con el fin de minimizar riesgos y disfrutar la experiencia al realizar nuestras actividades.

Considera las siguientes recomendaciones:

Vístete de acuerdo a la ocasión.
Si vas a andar en la calle, no portes joyas o accesorios de lujo, evita que tu atuendo llame mucho la atención y utiliza zapatos de goma. Lleva únicamente el dinero necesario en billetes y monedas de baja denominación. Cuida tu cartera y reconsidera el tamaño de tu bolsa, ya que puede resultar inconveniente. Considera las restricciones de accesorios para algunos lugares tales como estadios (cámaras, binoculares grandes, hebillas y cinturones gruesos, paraguas).

Planea tu salida y ruta.
Adquiere o reserva con antelación tus lugares, conoce las recomendaciones de acceso y seguridad para eventos masivos. Procura salir en compañía de alguien o partir en caravana con otros. Planea tu ruta considerando utilizar mayormente vías rápidas. Si usas transporte público, determina los lugares más próximos y seguros para subirte y bajarte. Averigua los datos para pedir un taxi seguro. Comunica a tu familia o alguien de tu confianza el plan y con quien estarás en todo momento.

Si estarás en una cafetería.
Adquiere y utiliza un candado para asegurar tu laptop a la mesa, así como alarmas o rastreadores satelitales. Evitar dejar encargado a tus "vecinos" tu laptop para ir al baño. Desconfía de quien se tropiece frente a ti o vierta sobre tu ropa alguna bebida, pues puede ser una maniobra de distracción para robar tus pertenencias. Selecciona una mesa junto a la pared y mantente alerta ante la presencia de bandas de delincuentes especializadas en estos lugares.

Si acudes a un parque de diversiones o te vas de día de campo.
Procura ir y regresar de día. Si sales en grupo, utilicen prendas distintivas (camisetas, gorras o pañoletas de color) para localizar fácilmente a los integrantes. Establece un punto de reunión para casos de extravío. Opta por lugares concurridos y con guardabosques. Si rentas o contratas equipos o servicios, corrobora bien sus precios y características para evitar malas prácticas de los prestadores.

Si vas de compras.
Mantén tu bolsa junto a tu cuerpo. Desconfía de quien te pida ayuda para alcanzar algún producto, te "asista" indicando que tu ropa ha sido salpicada, o que sufra un tropiezo o caída frente a ti, ya que pueden ser maniobras de distracción para robar tus pertenencias. Si participas en encuestas, no proporciones información personal.

Si tendrás reuniones en un restaurante o bar.
Acude a lugares bien establecidos. Selecciona una mesa cerca de una salida de emergencia. No cuelgues tu bolsa en la silla, si detrás de ella se puede sentar otra persona. No seas ostentoso y cuídate de la ingeniería social: desconfía de "ligues" fáciles.

Aprende a identificar bebidas adulteradas, evitar beber en exceso pues ello te hace vulnerable. Determina con tus amigos quien será el "conductor designado" para que permanezca sobrio, revise la cuenta y conduzca a todos a su casa.

Considera que el tomar fotos o videos, puede molestar a algunas personas. Evita conflictos y evade a personas bajo los efectos del alcohol o agresivas. Paga preferentemente en efectivo y si lo haces con tarjeta no la pierdas de vista.

Si asistes a un evento en un auditorio o estadio.
Atiende las recomendaciones de seguridad de los organizadores del evento. Evita comprar tus boletos en reventa o adquirir productos ilegítimos en los puestos. No muestres tus boletos a terceros no identificados, ni aceptes cambios a un mejor lugar, ya que te pueden robar tus entradas. No caigas en fanatismos exagerados, no arrojes objetos o bebidas, no insultes a la gente ni respondas a las provocaciones de otros. Reporta cualquier incidente al personal de seguridad.

Cuando sales de algún lugar o de un evento.
Incorpórate a grupos de peatones. No te detengas a curiosear en los puestos ambulantes, ni permanezcas parado en la calle, camina con seguridad y dirígete a un lugar seguro. Si vas a utilizar un taxi, hazlo de forma segura. Si utilizas transporte público, considera las recomendaciones del Manual de Seguridad y si te trasladas en un vehículo, atiende los consejos de los expertos para tu seguridad en el tráfico.


lunes, 4 de septiembre de 2017

¿QUÉ OPINAS PREVENIR O REPRIMIR?






 ¿QUÉ OPINAS PREVENIR O REPRIMIR?
Según estudios de seguridad realizados en los Estados Unidos entre 1980 y el 2010, han mostrado que por cada 10% de incremento en las tasas de encarcelamiento, únicamente se ha observado entre un 2 y un 4% de descenso en los índices delictivos. De hecho, desde el 2000, el incremento de los niveles de encarcelamiento en los Estados Unidos ha representado prácticamente un nulo decremento de la incidencia delictiva. Los investigadores llegaron a la conclusión que en el 2000 había 1.2 millones más de personas en las cárceles de Estados Unidos que las que había en 1975, es decir, un 270% más de reclusos; sin embargo, los índices de crímenes violentos eran prácticamente los mismos en el 2000 que los de 1975 y los delitos contra la propiedad fueron, en el 2000, 20% menores que los reportados en 1975.
Nuevas perspectivas, explica en conjunto, que son otras acciones las que coadyuvan a bajar el índice delincuencial, tomando como referencia el país del norte, es más eficaz en la represión pero mantiene el mismo índice de delincuencia, resulta contradictorio – verdad?  
Si bien no podemos decir, en términos absolutos, que esta situación sea la misma que en Ecuador o en cualquier país de Latinoamérica, podríamos considerarla equiparable, pues los costos sociales, culturales, políticos y económicos de las cárceles, versus la poca evidencia de reinserción social, la alta reincidencia y las altas tasas delincuenciales que prevalecen, ponen en tela de juicio los modelos.
No obstante nuestras ideas van en conjunto con el progreso de los ciudadanos, en materia de seguridad, justicia y derechos humanos, cuyos fines son el bienestar de la colectividad, fortalecidos en el entorno social como el aumento progresivo de salarios, empleo, educación en valores, diferentes culturas, etc.
Ideas coadyuvantes:
El gobierno, con la Reforma Penal, ha logrado establecer un nuevo sistema de justicia penal en el país que propone una serie de medidas cautelares, distintas a la prisión preventiva.
Los ciudadanos, apoyados por las autoridades, debemos ocuparnos, juntos, de promover e impulsar estrategias de seguridad comunitarias que impliquen, amén de la seguridad física, la prevención social de la violencia y la delincuencia, buscando, a toda costa, apoyar a los jóvenes para que alcancen mejores niveles de educación y lograr, de esta forma, una mejor perspectiva de vida.
Los empresarios e industriales, deben enfocarse en desarrollar más y mejores empleos de calidad, mejor pagados y con una perspectiva más allá de lo comercial, de responsabilidad social auténtica y genuina.
Al descender la incidencia delictiva, necesariamente se eleva la confianza de la ciudadanía, se facilita la inversión, se fomenta el empleo y, entonces, podremos decir que después de la crisis de la seguridad pública, logramos trascender y llegar a la seguridad ciudadana, encaminándonos correctamente para alcanzar la seguridad humana.
Déjanos tu opinión es importante.
¿Qué opinas?, ¿le seguimos invirtiendo a la represión en las cárceles (centros de rehabilitación o mejor le apostamos a la prevención?

domingo, 6 de agosto de 2017

DEBEMOS DISPENSAR EL BUEN TRATO A LOS DEMÁS


A

El trato que dispensamos a las personas marca la diferencia para propiciar o bien relaciones armoniosas, de respeto, inclusión, solidaridad, igualdad y equidad, o, por el contrario, relaciones desastrosas caracterizadas por la falta de respeto, exclusión, indiferencia, desigualdad, inequidad y violencia, situaciones y acciones que pueden derivar en agresiones, en delitos o, incluso y en casos extremos, en la muerte de una persona.
El principio del buen trato a los demás se basa en el reconocimiento de los otros como seres diferentes y especiales que tienen el derecho a ocupar un espacio físico, intelectual y afectivo en nuestras vidas, otorgándoles, a la vez, el derecho a ser escuchados, vistos y a disfrutar de garantías para su vida, su integridad y desarrollo.
El abrirnos y reconocer a los demás, nos permite ser empáticos al conocer y aceptar los sentimientos y preocupaciones de los otros. La empatía, esa capacidad que nos conduce a la solidaridad y, ser solidarios, es un atributo que toda persona que vive en sociedad debe poseer para el bien vivir.
El buen trato nos da la oportunidad de vivir en paz.

Tratar bien a las personas implica tener una interacción igualitaria, el establecer un diálogo y comunicación auténtico y sincero, teniendo la capacidad, con base en la tolerancia y el respeto, de resolver cualquier tipo de conflicto que se presente.
Es lamentable observar que nuestra vida cotidiana a nivel familiar, comunitario, escolar, laboral y social está, en alguna medida, plagada de malos tratos.
El maltrato a los demás surge por nuestra incapacidad de reconocer los verdaderos problemas que se tienen, por atacar a las personas y no a los problemas, sin asumir responsabilidad o de lo que se dice o de lo que se hace (coherencia).
Resulta increíble el grado de violencia que llegan a alcanzar algunas relaciones de pareja, de familia, entre vecinos, entre alumnos, los miembros de una organización y, desde luego, de personas en las calles donde, por motivo de algún incidente, alguien maltrata al otro"pisoteando"su dignidad y desata su furia, detonando un hecho lamentable con consecuencias, muchas veces, irreparables.
Existen casos donde alguien que es maltratado busca la forma de vengarse directamente del maltratador o, bien, al comentar la situación con algún tercero, dicho tercero se solidariza con el afectado y busca afectar a la persona de alguna manera, agrediéndola o "poniéndola" al señalarla ante algún criminal, para hacerla víctima de un delito.

Por lo anterior, debemos fomentar en las personas la cultura del buen trato a los demás, desde niños, conociendo y entendiendo cómo abordar y desarrollar, en las distintas etapas de la vida, los factores de riesgo y protección.

Y tú, ¿eres una persona amable y cortés, o eres un ruin y un déspota?, vale la pena que reflexiones cómo tratas a la gente y como tratan los tuyos a los demás, pues el simple "modito" que tengan de tratar a las personas, puede ser el factor que, en algún momento, detone una situación que cambie sus vidas para mal.


O/M.

martes, 11 de julio de 2017

COMO DEJAR LOS MIEDOS Y ENFRENTAR LO DESCONOCIDO




COMO DEJAR LOS MIEDOS Y ENFRENTAR LO DESCONOCIDO

Uno de nuestros grandes miedos como seres humanos es lo desconocido, y con razón, porque lo desconocido implica riesgos y nosotros estamos entrenados instintivamente a evitar riesgos, cambios, lo nuevo, lo diferente porque eso implica retar y poner en peligro nuestra sobrevivencia (sea la amenaza real o no es simplemente un instinto).

Algo que nos atemoriza por su misma naturaleza desconocida es el explorar y dejarnos llevar por nuestros sentimientos/emociones y aspectos profundos de nuestro ser.

Muchas veces creemos y sentimos que no le podemos dar “rienda suelta” a nuestras emociones y sentimientos, nos empezamos a sentir incómodos, atemorizados, fuera de “control”…Lo mismo sucede con espacios que van más allá de nuestros patrones de pensamiento habituales, cuando hay silencio en nuestra mente, cuando empezamos a explorar pensamientos desconocidos a aquellos a los que estamos acostumbrados… de nuevo nos sentimos incómodos, atemorizados, no estamos seguros de a dónde nos va a llevar esto…

Y es en esos momentos en que la gran mayoría de las veces recurrimos a nuestras distracciones, qué distracciones?… ya sean acciones o pensamientos que SI conocemos (sean que nos gusten o no, que nos beneficien o no), pero que nos hacen sentir cómodos (no necesariamente bien), que nos dan una sensación de estar a “salvo”…

Acciones o pensamientos que se convierten en un “salvavidas”, en algo que percibimos es un océano de peligro. Además las distracciones cumplen con su labor porque nos dan algo o alguien más a quien culpar por nuestra insatisfacción, decepciones, desilusiones…

Esas distracciones son en algunos casos pensamientos de victima: el mundo esta en contra mío, hay algo mal en mi, yo soy inadecuad@, no soy suficiente, yo no merezco esto y lo otro…
Otros son repeticiones y re-vivencias de nuestro pasado, memorias que pasamos en nuestra mente una y otra vez…
O deseos para el futuro (muchas veces irrealistas) imaginaciones que pasamos en nuestra mente una y otra vez…

O pensamientos obsesivos como pensamientos suicidas, de resentimiento, de separación, de venganza…Otras veces son mantenernos en relaciones no-recursivas (que no nos sirven) o conflictivas que puede que ni disfrutemos pero que nos distraen de nosotros mismos y de lo que no queremos enfrentar o conocer…

Otras son acciones comer, comprar, obsesionarnos con algo…Y cuando empezamos (si es que llegamos a eso) a ser conscientes que esto no nos beneficia, que nos tiene estancados, que nos lastima, que nos limita, que nos trae infelicidad, estas distracciones se convierten ellas mismas en un problema, en algo que debemos solucionar y/o eliminar de nuestras vidas y en ese momento creamos otra distracción más!  
La distracción de tener un enemigo a quien combatir (la distracción original!)

Buscamos una solución para un problema que nunca fue real sino una distracción, y como buena distracción nos va a dejar distraídos de la verdadera esencia de lo que realmente esta ocurriendo…

Y ahí seguiremos una carrera sin fin en intentar “arreglarnos” a nosotros mismos y a nuestros problemas… y cuando en algo somos exitosos haciéndolo (solucionando el espejismo de problema) no nos sentimos ni plenos ni satisfechos porque ese nunca fue el verdadero problema …
Entonces? Y ahora? pues a crear/buscar/ reutilizar otra distracción…
Entonces la pregunta para tu reflexión es:
Estás creando/utilizando/reusando distracciones que te alejen de aquello que te asusta o incomoda enfrentar?
Prefieres una distracción que explorar lo desconocido dentro de ti?
Prefieres “solucionar” una emoción con una distracción?
El ser conscientes de lo que verdaderamente ocurre es el primer paso para realmente liberarnos de aquello que nos mantiene limitados y encerrados en un miedo ilusorio…

Dejémonos liberar del miedo, porque en realidad son distracciones ilusorias...enfrentemos lo desconocido con mente positiva y buenas decisiones, lograremos nuevas perspectivas y acciones con propósitos.    O.M





sábado, 17 de junio de 2017

BAJAR EL PERFIL, ES MIMETIZARSE EN EL ENTORNO


BAJAR EL PERFIL, COMO MEDIDA DE SEGURIDAD. 



Una de las principales recomendaciones es la de mantener un perfil bajo para evitar llamar la atención de otros, algunos malintencionados, quienes nos pueden seleccionar como sus próximas víctimas, al observar en nosotros vestimentas, prendas, joyas, accesorios o artículos que les indiquen que les representaremos un blanco lucrativo.


Se nos aconseja, pues, el evitar mostrar un alto perfil y tratar de pasar desapercibidos, mimetizándonos, en lo posible, con el resto de las personas en el entorno, adoptando una apariencia de igualdad con los demás.



Esta recomendación, sin embargo y con frecuencia, no sólo no es acatada por muchos con la debida consideración en términos de seguridad, sino que, por el contrario, buscan afanosamente el diferenciarse, mostrándose ante los demás como personas con un alto poder económico y, en sí, en su paradigma, como "triunfadores" y "exitosos".

Dicha diferenciación, encima de hacerlos vulnerables, los hace desiguales y la desigualdad, como tal, genera muchos otros problemas, y sobre todo riesgos para su integridad.

Vale aquí unas medidas de seguridad:

Bajar el perfil en lugares específicos (quitarse los accesorios, evitar sacar el celular, etc)

No aparentar lujos; especialmente en lugares no adecuados, ni seguros.

Apariencia de igualdad con el resto de personas. 

Recuerde que el perfil de los delincuentes también ha cambiado, hoy se les puedes ver bien vestidos, utilizan mujeres bonitas, niños, ancianos, etc.






martes, 6 de junio de 2017

LA MORAL SELECTIVA

LA MORAL SELECTIVA, EL DESAFIO DEL SER HUMANO FRENTE A LA ÉTICA


El término moral selectiva es hacer lo que le conviene: Haciendo un simple ejercicio de observación sobre las personas y su entorno, se llevó a cabo el análisis sobre dos factores:
El primero que surge es el nivel de estudios: las personas con mayor preparación académica, por lo general tienen mejor entendimiento para saber diferenciar entre lo bueno y lo malo. Desafortunadamente, con base en la experiencia, también son en la mayoría de los casos, aquellas que han cometido fraudes de mayor cuantía y responsables de desarrollar y orquestar los esquemas más sofisticados.
El segundo, la educación en el núcleo familiar, identificando que las personas con antecedentes de valores solidos inculcados y aplicados por los padres, poseen las mejores herramientas para discernir y evaluar lo apropiado de su conducta ante una situación específica. Pero, también desafortunadamente, se ha observado que esto es un tanto subjetivo, ya que en más de un par de ocasiones, las personas involucradas en perpetrar un fraude han sido identificadas como provenientes de las mejores cunas y en apariencia criados con altos estándares morales; llegando incluso a cometer fraude en perjuicio de sus padres y/o hermanos.
Con base en lo anterior, se esperaría que las personas que tienen una combinación de alto nivel de estudios y provenientes de familias con altos estándares morales, deberían estar exentas de cometer actos fraudulentos; y que de esa “medida para abajo”, por decirlo de alguna forma, aumente la propensión de las personas a cometer fraude. Triste decirlo, pero lo anterior, también se aleja de la realidad que se observa en la práctica, Esa frase, se acerca mucho a la realidad, y no solo en referencia a la realidad que rodea a las personas que han cometido fraude, sino a la realidad que todos nosotros vivimos cotidianamente. Siendo esta misma realidad cotidiana, la que demuestra que se utiliza esa “Moral Selectiva” cada vez que nos quedamos con algo que no es nuestro, que violamos una regla de urbanidad por comodidad o rapidez, que utilizamos una pequeña compensación para agilizar un trámite o evitar una simple multa de tráfico, que hacemos ostentación de una posición de mando o poder para evitar ser sancionados, entre muchas otras.
Entonces ¿Por qué las personas llegan a cometer un fraude?
Porque el ser humano tiene la capacidad inherente de adaptar su moral ante las situaciones, la cual no siempre refleja su nivel de estudios y/o educación en el seno familiar. Por nuestra “Moral Selectiva”.
Haciendo hincapié, en que estas líneas, solo muestran algunas características de los perfiles de los defraudadores, y señalando, que afortunadamente la experiencia, también nos ha mostrado ejemplos, a todos niveles de estudios y/o educación, de personas que han dado evidencia de su honestidad.
Para finalizar, compartimos una de las teorías que toca el componente de integridad:
La teoría básicamente dicta que en cualquier población, 20% de sus integrantes se comportará honestamente más allá de las circunstancias, otro 20% buscará activamente debilidades en los controles y oportunidades para cometer fraude, y la mayoría de la población, 60%, se comportará honesta o deshonestamente dependiendo de una combinación de circunstancias (necesidad o motivo y oportunidad). (Fuente: Bologna, Wells & Lindquist, The Accountant’s Handbook of Fraud and Commercial Crime, USA, Wiley and Sons, 1993)
Queda entonces el sinsabor frente a la escala de valores que se aplican en todas las situaciones de la vida y como desde nuestra propia perspectiva, la ética y el fraude siempre entrarán en conflicto. De nosotros depende entonces que las decisiones y actuaciones siempre estén enmarcadas en una moral ética que no permita el fraude y las actividades ilegales.
O/M.

sábado, 3 de junio de 2017

NO DEJEMOS QUE LAS NORMAS SE PIERDAN







Podemos definir a la anomia, como la falta de normas pero, asimismo, como la incapacidad de la estructura social de proveer a ciertos individuos de lo necesario para lograr las metas de la sociedad.


La anomia es un fenómeno que poco a poco va desviando y termina por romper las normas, generando caos en la sociedad, al ver impuestas nuevas reglas que promueven el aislamiento, las actividades fuera de la ley, inhibiendo, así, la cooperación social y fomentando la desconfianza entre las personas.

Al observarnos, podemos reconocer que estamos viviendo, en diversas formas, en una situación de anomia, desde el simple hecho de no inmutarnos al ver que alguien se pasa un semáforo en rojo, al fomentar la corrupción dando dinero a un policía para que no nos infraccione, al evitar el hacer fila en algún lugar, al no pagar nuestros impuestos o al no censurar y castigar los constantes escándalos de corrupción política.

Vivimos en una sociedad en la cual el fin justifica los medios. Lograr éxito económico, a pesar de incurrir en omisiones, infracciones o acciones francamente delictivas, al parecer no tiene ya importancia, cuando vemos la cultura de ilegalidad que prevalece y los actos de corrupción de infinidad de personas que acaban, increíblemente, en la impunidad cuasi total.

Debemos entender que el continuar de esta manera, en la anomia, lejos de estar viviendo, estamos sobreviviendo y enfrentamos el alto riesgo de degenerarnos más y más.

No te resignes a vivir en la anomia, inculca y fomenta la cultura de la legalidad:

  • En tu hogar, promoviendo en tu familia la buena educación y predicando con el ejemplo.
  • En tu comunidad, proponiéndote ser un buen vecino.
  • En tu escuela, siendo un miembro activo y constante de tu comunidad escolar.
  • En tu trabajo, participando, colaborando e impulsando los objetivos organizacionales.
  • En tu sociedad, respetando y tolerando a los demás y exigiendo a las autoridades transparencia y rendición de cuentas.

Quizá seas de los que piensa que cambiar es muy difícil. Mejor reconoce que no es imposible y ponte a trabajar para que se respeten las normas, pues si todos y cada uno de nosotros hacemos lo propio, lograremos y alcanzaremos a ver los cambios en el mundo que hoy nos tocó vivir.
O/M.

lunes, 3 de abril de 2017

GANADORES VS. PERDEDORES




GANADORES Y PERDEDORES

Cuando un ganador comete un error, dice: “Me equivoqué y aprendí la lección”.
Cuando un perdedor comete un error, dice: “No fue mi culpa”, y se la atribuye a otros.

Un ganador sabe que el infortunio es el mejor de los maestros.
Un perdedor se siente víctima de la adversidad.

Un ganador sabe que el resultado de las cosas depende de él.
Un perdedor cree que la mala suerte existe.

Un ganador trabaja muy fuerte y se permite más tiempo para sí mismo.
Un perdedor está siempre muy ocupado, y no tiene tiempo ni para los suyos.

Un ganador enfrenta los retos uno a uno.
Un perdedor les da vueltas y vueltas y no se atreve a intentarlo.

Un ganador se compromete, da su palabra y la cumple.
Un perdedor hace promesas, no asegura nada y, cuando falla, sólo se justifica.

Un ganador dice: “Soy bueno, pero voy a ser mejor”.
Un perdedor dice: “No soy tan malo como mucha otra gente”.

Un ganador escucha, comprende y responde.
Un perdedor sólo espera hasta que le toque su turno para hablar.

Un ganador respeta a los que saben más que él y trata de aprender de ellos.
Un perdedor se resiste ante los que saben más que él y sólo se fija en sus defectos.

Un ganador se siente responsable por algo más que su trabajo.
Un perdedor no se compromete y siempre dice: “Yo sólo hago mi trabajo”.

Un ganador dice: “Debe haber una mejor forma de hacerlo”.
Un perdedor dice: “Esta es la manera en que siempre lo hemos hecho”.

Un ganador es parte de la solución.
Un perdedor es parte del problema.

Un ganador se fija en toda la pared.
Un perdedor se fija en el ladrillo que le corresponde poner.

LA CRISIS PENITENCIARIA EN ECUADOR

  EI sistema carcelario del Ecuador atraviesa un proceso de crisis institucional que es necesario el debate público sobre la organización,...